Con «El final feliz» José Luis Muñoz construye una pentalogía sobre el País Vasco
La editorial Cosecha Negra acaba de publicar El final feliz de José Luis Muñoz con la que obtuvo el premio de Novela Ciudad de Alcorcón, narración con la que vuelve, una vez más, al País Vasco y a sus heridas recientes y con el terrorismo como telón de fondo. Una época convulsa la que retrata el autor, especializado en la novela de género negro, compleja a la hora de analizar como lo hace Muñoz, huyendo de maniqueísmos fáciles. ETA, la kale borroka, una juventud sin salidas profesionales ni vitales, una sociedad en donde campa a sus anchas el miedo y la violencia son las líneas argumentales en las que se mueve esta novela con una estructura original, de atrás a adelante, para que el final de la novela resulte feliz y esperanzador. Pero Iñaki, su joven protagonista, está marcado por el destino.
Iñaki es un joven vasco de Bilbao que vive con sus padres ya muy mayores en una modesta vivienda próxima a la ría, malvive con trabajos precarios, no le va bien con su chica y no ve claro su futuro. Con los miembros de su cuadrilla las cosas empiezan a torcerse cuando parte de ellos jalean los atentados de ETA y él se muestra escéptico ante su patriotismo y crítico frente a la barbarie que sacude al País Vasco en los llamados años del plomo. Con El final feliz, que ganó el premio de novela Ciudad de Alcorcón, José Luis Muñoz sumerge al lector en ese periodo violento que convulsionó a la sociedad española causando tanto dolor y culmina una pentalogía sobre el País Vasco y ETA de la que forman parte sus novelas La caraqueña del Maní, Tu corazón, Idoia, Cazadores en la nieve y El bosque sin límites.