Qué ver en Galicia I: descubre A Coruña, Vigo y Santiago de Compostela
Se acerca la Semana Santa y son muchos los que ya están planeando alguna que otra escapadita. Las grandes ciudades, como Madrid o Barcelona, son una muy buena opción para aquellos que desean experimentar en primera persona el ritmo vertiginoso de una metrópolis. Además, la oferta cultural y de ocio de estas ciudades suele multiplicarse durante estos días festivos, por lo que el viaje estará cargado de nuevas e increíbles experiencias.
Para los que, por el contrario, buscan huir de la rutina y el estrés del trabajo en un paraje tranquilo pero sin renunciar a las comodidades que todo entorno urbano ofrece al visitante, Galicia es una elección idónea. ¿Los motivos? No es difícil explicar por qué Galicia es un remanso de paz para quien desea sumergirse en la naturaleza más salvaje un par de días: sus paisajes de interior y sus cientos de kilómetros de costa escarpada son uno de sus mayores atractivos. Pero por si esto no fuera suficiente, las grandes ciudades de la comunidad esconden auténticos tesoros en su interior que hacen que su visita esté cargada de sorpresas, además de ofrecer también una completa oferta cultural y de ocio. A continuación os ofrecemos un pequeño recorrido por tres de ellas:
A Coruña
Si bien A Coruña no es la capital de la comunidad, para muchas personas es la ciudad más importante o, al menos, la más cosmopolita de Galicia. En las calles de A Coruña se respira un aire moderno y urbanita que es difícil encontrar en otras ciudades gallegas, a excepción de Santiago de Compostela. Toda la ciudad está plagada de locales nuevos en los que disfrutar de increíbles desayunos, brunchs y meriendas; por no hablar de la oferta gastronómica que en los últimos meses se ha ampliado con la apertura de restaurantes que exploran nuevos sabores de la cocina internacional. Si lo que prefieres es tomar algo a media tarde, la zona de la dársena y la Palloza son tus puntos de reunión.
Este dinamismo también se deja sentir en su oferta de ocio, acogiendo infinidad de exposiciones, conciertos, obras de teatro o ferias. Entre los museos destacan especialmente el de Bellas Artes, la Casa Museo Picasso, la Domus, el Museo Arqueológico del Castillo de San Antón o la Casa Museo de Emilio Pardo Bazán. También son interesantes las visitas a la Casa de las Ciencias o al planetario, además de al acuario.
Para cuando el cuerpo te pida un poco de tranquilidad, qué mejor que recorrer su paseo marítimo, el más largo del mundo, para llegar al conjunto de la Torre de Hércules. Este faro romano impresiona no solo por su altura y perfecto estado de conservación, sino que el lugar en el que está emplazado, con un entorno verde y el mar rugiendo al lado sobrecogen al visitante. Además de esta visita imprescindible, también es recomendable la subida al Monte de San Pedro, el mejor mirador de la ciudad.
A Coruña cuenta con una amplia variedad de hoteles y hostales en los que hospedarse, pero si lo que buscáis es combinar la tranquilad con la vitalidad de la ciudad os recomendamos pasar unos días en las Cabañitas del Bosque, un complejo ubicado en Noia que ofrece alojamiento en auténticas cabañas construidas en lo alto de los árboles.
Vigo
Nos trasladamos a la ciudad con mayor población de toda Galicia. El núcleo urbano de la ciudad olívica presenta una distribución que pocos turistas alaban, y es que Vigo cuenta con innumerables desniveles que hacen que recorrerla sea, cuanto menos, cansado. No obstante, merece la pena. En plena urbe podemos encontrarnos con espacios verdes de gran belleza como Castrelos o O Castro, desde donde se puede disfrutar de una espectacular vista de la ría. El paseo del Arenal también es recomendable para empaparse de la zona más marítima de Vigo, y en él podréis encontrar la famosa escultura de Julio Verne. Tampoco podéis perderos el Dinoseto, considerado ya como la mascota de la ciudad, ni el Sireno, una de las estatuas más icónicas de Vigo. Ambos se encuentran en la céntrica Puerta del Sol.
Si lo que buscáis es un ambiente más comercial, Gran Vía y Príncipe son vuestras calles, mientras que para los amantes del fútbol sin duda una visita obligada será el estadio de Balaídos, escenario de grandes encuentros entre equipos de primera. El club celeste no se encuentra en su mejor momento, de hecho en sus últimos encuentros como contra el Real Madrid no partía como favorito en los pronósticos, pero la visita al campo está recomendada para los más sentimentales.
Existen diferentes rutas o roteiros para conocer la parte urbana de Vigo; de hecho, el escritor Pedro Feijoo publicó hace un par de años “Camiñar o Vigo vello”, una guía magnífica para descubrir los detalles más desconocidos de la evolución de la ciudad. No obstante, para muchos el atractivo de Vigo se encuentra fuera de los límites de la propia ciudad, especialmente en sus playas. Aquí destacan Samil y O Vao, a las que se puede llegar a través del transporte urbano. Muy próximos se encuentran los municipios de Nigrán y Baiona, cuyas playas son de lo más recomendables, especialmente Patos, uno de los epicentros del surf gallego.
Santiago de Compostela
Capital de la comunidad y centro de peregrinación desde hace siglos, Santiago de Compostela es la joya de la corona de Galicia. Al tratarse de una ciudad pequeña, recorrerla en su totalidad no os llevará más de dos días. La Catedral es el mayor atractivo de Compostela, pero también es interesante visitar otras construcciones de gran valor arquitectónico como el Monasterio de San Martín Pinario, el Convento de Santa Clara, la Colegiata de Santa María la Real del Sar, el Colegio de Fonseca, la Casa de la Parra o el Hostal de los Reyes Católicos. Asimismo, en Compostela también se pueden encontrar ejemplos de la conocida como arquitectura de autor, como la Facultad de Ciencias de la Comunicación, el Centro Gallego de Arte Contemporáneo, la Escuela de Altos Estudios Musicales o la popular Ciudad de la Cultura.
Además de un amplio y variado patrimonio arquitectónico y artístico, Santiago también cuenta con una extensa oferta cultural que hace las delicias de los miles de estudiantes universitarios que viven en la ciudad. Asimismo, Compostela también alberga varios pulmones verdes que se configuran como un oasis de paz y naturaleza en medio de un entorno urbano. Entre ellos destacan especialmente los parques de Bonaval, Belvís y Galeras, así como la Alameda, ubicada en pleno centro de la ciudad.
Pasear por las calles empedradas del Casco Histórico es más que suficiente para evadirse del mundo, pero si os sentís en la necesidad de planear una excursión a alguna zona cercana os recomendamos visitar Porto do Son y Corrubedo. Solo os llevará 30/45 minutos en coche y la paz y tranquilidad que se respira en sus playas es difícil de encontrar en otro lugar.
Cerramos este artículo con esta breve visita por tres de las ciudades más importantes de Galicia. Próximamente os hablaremos de los secretos mejor guardados de Pontevedra, Lugo y Ourense.
