Palacio de Justicia, de Rosa Burgos
Quien mejor para hablar de la injusticia que nos envuelve que una funcionaria de justicia. Rosa Burgos (Cuellar, Granada, aunque vive en Málaga) ha estado toda su vida vinculada a la administración de justicia desde su cargo de letrada y ha publicado los ensayos La muerte de García Caparrós en la transición política, El sumario Fernández Quesada, ¿una transición modélica?, La bala que cayó del cielo y Las muertes de García Caparrós, en los que denunciaba irregularidades judiciales, pero Palacio de Justicia, el original poemario que acaba de publicar en el Garaje Ediciones no es la única incursión que esta jurista hace en el terreno de la poesía.
Al hilo de sus experiencias personales, que le han golpeado y herido a lo largo de su vida profesional, los breves poemas de este volumen son una llamada de atención sobre las muchas injusticias de las que ha sido testigo. Le duele la crisis migratoria—Hace muchos meses que salí de la casa de mis padres con el deseo de encontrar una vida nueva. Les dejé mi número de móvil anotado con un tizón en la puerta. He recibido una llamada de mi madre. “Madre, ya no quiero llegar a la frontera, le digo, allí hay cuchillas en las alambradas que trocean mi cuerpo enfermo y cansado y hay armas que disparan contra mi corazón”—; la soledad de la muerte—En la diligencia que extendí/se hizo constar que la data de la muerte/es de más de un mes,/no constan señales de violencia/la casa permanece en orden, el cuerpo/en decúbito supino, descansa/en mitad del salón./Transcribo antes de firmar/, una nota manuscrita:/”Tomad y bebed: este es mi cuerpo”.—; el paisaje de los desahucios—Cabalga por las escaleras/el sistema en fila india./ Pistolas y porras en manos policiales./Papeles encerrados en carteras de piel/que echan en cara la legalidad del acto—, la corrupción, los suicidas, el terrorismo, la violencia en el ámbito familiar…
No por breves son menos intensos estos textos que duelen e integran esta antología Palacio de Justicia que es una reflexión sobre la injusticia que nos ha tocado vivir y del que Rosa Burgos levanta acta en este libro ilustrado por Alejandro Pacheco. Poesía social, de denuncia: poesía negra.