“Nuestros protagonistas son todos artistas y bohemios: una actriz, una directora de cine, un escritor, un empresario de la noche.  Todos gente frágil, con mucho ego, bastante personalidad y más imaginación, a los que triunfar en su profesión obsesiona y desespera”. Son palabras de Inés París, directora que rueda estos días en Valencia, y hasta finales de marzo, LA NOCHE QUE MI MADRE MATÓ A MI PADRE, en la que la actriz BELÉN RUEDA realiza su primera incursión en la comedia cinematográfica “en un personaje que ha sido escrito para ella y en un registro, de comedia pura y dura, en el que no estamos acostumbrados a verla”, subraya la realizadora.

Junto a Belén Rueda, LA NOCHE QUE MI MADRE MATÓ A MI PADRE reúne un elenco de grandes actores que suman su talento a esta “comedia de personajes”, como la describe su directora y guionista, con quien ha colaborado Fernando Colomo en la escritura. DIEGO PERETTI, EDUARD FERNÁNDEZ, MARÍA PUJALTE, FELE MARTÍNEZ y PATRICIA MONTERO son coprotagonistas de este “peculiar ‘zoo humano’ en el que todos son o han sido pareja y tienen hijos en común. Su ‘modernidad’, ‘tolerancia’ y ‘racionalidad’ son vistas con humor y complicidad. Porque todos sabemos que por muy bien que nos llevemos con alguien que ha sido nuestra pareja, siempre hay cuentas pendientes…”, señala París sobre el rodaje de su cuarto largometraje de ficción, tras A mi madre le gustan las mujeres, Semen, una historia de amor y Miguel y William.

En LA NOCHE QUE MI MADRE MATÓ A MI PADRE, Isabel es la anfitriona de una cena muy especial: su marido Ángel, guionista, y Susana, la ex mujer de Ángel, directora de cine, quieren convencer al actor argentino Diego Peretti de que protagonice una película que han escrito. En mitad de la velada, para sorpresa de todos, se produce un acontecimiento inesperado que da un vuelco al transcurso de la cena.

Isabel, interpretada por BELÉN RUEDA, se debate por su necesidad de sentirse valorada profesionalmente como actriz, sus inseguridades, su temor a envejecer, su coquetería, sus contradicciones, su inteligencia y ansiedad. “La importancia de los personajes femeninos es una constante en todas mis películas: desde las protagonistas de A mi madre le gustan las mujeres (Leonor Watling, Rosa María Sardá…), de Miguel y William (Elena Anaya) o la coprotagonista de Semen, una historia de amor  -interpretada por Leticia Dolera y que no conoce el instinto maternal-, hasta las mujeres de carne y hueso que he retratado en mis documentales”, subraya Inés París.

Si bien LA NOCHE QUE MI MADRE MATÓ A MI PADRE es una comedia, entre sus líneas contiene cuestiones muy candentes hoy en día sobre las mujeres, e integradas en el guión desde su primera versión hace ya dos años, que se convirtieron en titulares de la última gala de los Oscar potenciados por algunas de las actrices más importantes del momento.