¡Ponte el disfraz!, es tiempo de carnaval en Gran Canaria

En estos días la isla de Gran Canaria deja la rutina y se lanza a celebrar el carnaval, la fiesta en la todo el mundo es bienvenido, casi todo est· permitido y las preocupaciones dejan paso a los disfraces, la purpurina y la diversión.

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El carnaval de Las Palmas de Gran Canaria est· considerado uno de los mejores del mundo, junto con los de Río de Janeiro, Venecia, Tenerife y Cadiz.

Desde hace ya más de una década, el acontecimiento que máss repercusiónn internacional consigue en el carnaval de la capital grancanaria es la Gala Drag. «Gala de la transgresiónn, la imaginación y el humor y seña de identidad», según dice Israel Reyes, director artístico del carnaval.

«Esta es una fiesta hecha desde el corazón», resume Reyes, que recuerda que sus grandes protagonistas son las murgas, las comparsas, las candidatas a reina, las «drag queens», los ciudadanos de a pie e, incluso, hasta sus mascotas.

Carnavales en la isla de Gran Canaria hay muchos y para todos los gustos, porque esta es la fiesta de la gente por antonomasia y es difÌcil hallar una ciudad que no tenga el suyo, ni un barrio que no presuma de sus comparsas y murgas.

Sin embargo, sobre todos ellos destaca uno: el de Las Palmas de Gran Canaria, considerado uno de los mejores del mundo, junto con los de Río de Janeiro, Venecia, Tenerife y Cadiz.

«Esta es una fiesta hecha desde el corazón», resume su director artístico, Israel Reyes, que recuerda que sus grandes protagonistas son las murgas, las comparsas, las candidatas a reina, las «drag queens», los ciudadanos de a pie e, incluso, hasta sus mascotas.

En la capital grancanaria el carnaval reparte su programa en diferentes enclaves, como el barrio histórico de Vegueta o la playa de Las Canteras, pero su centro neurálgico se encuentra en el parque de Santa Catalina, el lugar donde se celebran sus galas y donde, desde hace 21 años, se citan de noche las «mascaritas» en sus multitudinarias fiestas, conocidas como «mogollones».

 

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En Gran Canaria, los únicos requisitos para participar en las carnestolendas son tener ganas de diversión y buscarse un disfraz con el que vivir desde dentro la magia del carnaval.

Sin embargo, detrás de cada edición hay meses de trabajo. El diseñador Nauzet Afonso, ganador del concurso de maquillaje corporal en 2013, explica que lleva casi todo el año prepararlo,» porque no solo hay que crear las fantasías que se presentarán a los distintos certámenes, sino también buscar patrocinadores y decidir la puesta en escena, la coreografía y la música, entre otros aspectos».

 
LA GRAN CABALGATA Y LA GALA DRAG

 

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«Para un diseñador el carnaval lo es todo», resalta Afonso. «Es una industria que genera puestos de trabajo, arte, promoción, magia, diversiÛn y cultura, porque para diseñar hay que tener formación», añade el diseñador.

De todos los momentos del carnaval capitalino, su director artístico se queda con la «Gran Cabalgata», el acto más multitudinario (cada año reúne a decenas de miles de personas) y uno de los más esperados por grancanarios y turistas, porque no solo permite a cualquiera sumarse a la comitiva que recorre la ciudad, sino también disfrutar de más de un centenar carrozas temáticas.

«El día de la cabalgata hay que dejarse llevar por la marea humana», recomienda Israel Reyes, disfrazarse y disfrutar de un evento en el que «todo el mundo por unas horas es protagonista».

Otro de los actos imprescindibles en el carnaval de Las Palmas de Gran Canaria es la Gala de la Reina, donde las candidatas despliegan toda su elegancia y belleza, portando grandiosas y pesadas fantasías elaboradas con plumas, pedrería, purpurina y mucho ritmo y pasión.

 

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Los turistas y locales que quieran disfrutar de los carnavales de Gran Canaria también pueden acercarse a otros espectáculos como el concurso de maquillaje corporal -que se celebra solo en Las Palmas de Gran Canaria y en el que los cuerpos de los modelos se convierten «en verdaderos lienzos» para los diseñadores-, el carnaval de dÌa, la «fiesta de la sábana» o el carnaval tradicional, donde los vestidos blancos y los polvos de talco se convierten en los grandes protagonistas.

Mención aparte merece el entierro de la sardina, el recorrido y espect·culo que pone fin a la fiesta, donde miles de carnavaleros lloran el final de las fiestas vestidos de un peculiar luto.

 

Con informción de EFE

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