Por qué enamorarse de una persona que lee
Por sabios y empáticos. Y aunque son realmente irresistibles, algunas observaciones científicas incitan a ver en los lectores asiduos los mejores candidatos para enamorarse.
Por Paulina Zamora/Belelu
Leer, sabemos es más que un pasatiempo o buen hábito. En una hora de lectura o en una semana podrías vivir una vida completa en un libro, un siglo o la historia alrededor de un pequeñísimo instante, otras épocas lo sabemos también, alegrías y tormentos ajenos que llegan a sentirse en carne propia.
Por intuición advertimos que enamorarse de alguien que lee es una buena idea. Ahora también, el sitio Elite Daily aporta más razones con argumentos científicos.
De acuerdo a una autora del Time, las personas que leen desarrollan hábilmente la lectura profunda, esta capacidad los pone por encima de las personas promedio en inteligencia y amabilidad.
Empatía y variedad de perspectivas
Según otros estudios hechos por un par de psicólogos canadienses Raymond Mar y Keith Oatley, las personas que leen son más empáticas y capaces de analizar, comprender y hasta adoptar opiniones y creencias diferentes a las suyas. Punto a favor de la tolerancia, que mucha falta hace en todos los sentidos.
Esta empatía resulta importante si tan solo revisamos la tendencia egocentrista con la que a menudo nos topamos. Una persona que lee es capaz de ver su entorno desde varias perspectivas, no solo a través de sus propios ojos sino los de los autores y personajes. Podrá no estar de acuerdo con alguien, pero no cerrarse y valorar una visión distinta se agradece.
Los libros también moldean el carácter una vez que el lector ha hecho propios el triunfo y el fracaso, y ha experimentado las lecciones trascendentes y otras fugaces de la narrativa.
Ingenio y conocimiento
Una razón más: quienes han tenido contacto con la lectura desde la niñez, según Anne E. Cunningham, adquieren un vocabulario amplio que difícilmente obtendrían en la escuela; porque no se aprende de las clases en el aula sino por la exposición directa al uso de la lengua en los libros.
Además, las personas que leen tienen un nivel de inteligencia superior al promedio: desarrollan conversaciones complejas, son analíticos, poseen conocimiento amplio de algunos temas, son ingeniosos y dominan sus lenguajes. ¿Hay algo mejor que eso? Sí, lo hay: quienes leen son algo más que inteligentes, son sabios; porque trasladar las experiencias y aventuras vividas a través de los libros a una interpretación individual, una cosmovisión personal, puede regalarte notas de sabiduría invaluables.
Y bueno, sin recomendaciones científicas ya me he enamorado de aquel que lee en el piso y escribe en sus paredes. Ahora coméntanos si también consideras que los buenos lectores son las personas más adorables.
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