Evita el polvo en el sensor de tu cámara
Toma nota de estos sencillos consejos para reducir la entrada de polvo al sensor de imagen de tu cámara.
Por Christian Olivares/Fotografía.com
El polvo es uno de los grandes enemigos del fotógrafo. Se mete en todas partes, llega al sensor de imagen y acaba haciendo que algunas de tus fotos tengan que pasar por Lightroom o Photoshop para realizarles una limpieza a polvo. Es inevitable que ese odioso elemento llegue a nuestra cámara, eso es así, pero sí que podemos tomar algunas medidas para minimizar la entrada de polvo en el sensor y tener que limpiar el sensor con menos frecuencia. Joe Farace nos da algunas claves.
1. No cambios de objetivo en exteriores
Cambiar de objetivo es el motivo número uno para que el polvo se deposite en el sensor de tu cámara. Por eso, es importante cambiar de objetivos únicamente cuando estemos en un entorno controlado y seguro. Como norma general, intenta no cambiar en el exterior. Cualquier pequeña brisa puede hacer que el sensor acabe lleno de partículas. Si no tienes más remedio que hacerlo, intenta proteger la cámara todo lo posible.
2. Apunta hacia abajo
Siguiendo con el primer punto, siempre que cambies de objetivo, recuerda apuntar la cámara hacia el suelo. Esta norma se aplica tanto a interiores como exteriores. Como dice Farace, las cosas tienden a caer, no a subir. Si apuntas la cámara hacia abajo evitarás que el polvo caiga hacia el sensor de imagen.
3. Sé rápido
No te entretengas demasiado mientras cambias de objetivo y mantén el sensor desprotegido el menor tiempo posible. Generalmente yo saco el objetivo que quiero montar, le quito la tapa trasera y lo dejo apoyado sobre la delantera. Normalmente llevo una mochila, así que lo dejo dentro de la mochila para evitar posibles accidentes. Después le pongo la tapa delantera al objetivo que llevo en la cámara, lo dejo igualmente apoyado sobre ésta, cojo el otro objetivo, lo monto y después ya me preocupo de ponerle la tapa trasera al objetivo que acabo de quitar y de guardarlo de forma adecuada. ¿No habría que proteger también el objetivo? Sí, pero limpiar un objetivo es mucho más sencillo que limpiar un sensor y el polvo en la parte trasera de la óptica no se verá en las fotos.
4. Usa una bolsa
A veces es imposible proteger completamente la cámara del polvo o de partículas todavía más peligrosas como la arena. En esos casos Joe Farace recomienda usar una bolsa transparente y realizar el cambio de objetivo con la cámara metida dentro. Lógicamente, para ello es importante que la bolsa esté limpia. En caso contrario nos arriesgamos a conseguir justo el efecto contrario.
5. Usa la tapa de la cámara
Quizá ya no te acuerdas, pero las cámaras se venden con una tapa de plástico que cubre la montura. Normalmente todos llevamos un objetivo puesto y esa tapa suele quedarse olvidada en la caja de la cámara. Si no eres muy habilidoso quizá sería conveniente rescatarla y llevarla encima cuando salgas a hacer fotos. Así, si tienes que cambiar de objetivo, puedes colocar la tapa y reducir todavía más el tiempo que el sensor pasa desprotegido.
¿Y qué hacer si el polvo ya ha llegado al sensor de tu cámara? Tranquilo, como he dicho al principio del post, es algo inevitable. Nos ha pasado a todos con mayor o menor frecuencia y no es necesario asustarse. Basta con hacerse con las herramientas adecuadas y limpiar el sensor.