Joaquín Sabina, “Muy personal”
“Si fuera Antonio López pintaría este Madrid frío, gris, con niebla, maravilloso desde el Círculo de Bellas Artes”, decía Joaquín Sabina este jueves en la presentación de ‘Muy personal’, su último libro, publicado por Planeta.
Es cierto que no lo es, ni quiere, ni pretente. Pero esas ganas de dibujar cosas, de mostrar a través de colores y trazos, sorprende a quien desconoce esta faceta del artista jienense (la mayoría), aunque aún más lo hacen las páginas de su nuevo libro, que descubre al Sabina pintor, dibujante, ilustrador o garabateador, como le gusta llamarse.
En realidad, a Sabina siempre le ha gustado emborronar papeles. De versos, de citas, de prosas… de todo. Lo que pasa es que, como él mismo certifica, en los útimos años ha desarrollado una extraña responsabilidad frente a su profesión y se ha visto obligado a guardar la voz si quería cantar en el próximo concierto y por eso ha empezado a llenar y llenar cuadernos. Van ya 14 o 15. Para Luis García Montero, en realidad, lo que le pasa a Sabina es que “no sabe tener las manos quietas y por eso dibuja. Estos cuadernos son la muestra de esa necesidad de llenarlo todo”.
“Peces, culos, mujeres…”
Así, con el rotulador en mano parece que la cordura ha llegado a Tirso de Molina y la loca juventud de Sabina extendida hasta los 50 y muchos parece llegar a su fin. “No sabía que era bueno dormir un poquito por la noche y no hacer tantos excesos… He vivido así hasta que me di cuenta de que por respeto al público y al dinerito que cuesta la entrada había que cuidarse un poco”, afirma el músico.
En este libro se recogen fragmentos de un diario (no al uso, porque el músico y poeta confiesa que nunca ha podido llevar uno), escenas diarias, obsesiones, críticas, humor… “Peces, culos, mujeres, culos de mujeres, quería decir, también las ciudades que visito y mucho Madrid, pero el Madrid del siglo XXI y costumbrista”, apunta. Y eso a pesar de que confiesa que ahora España le produce “vómito, asco, indignación…”. Por ejemplo, “si en mis tiempos me hubieran dicho que iban a hacer un casting para tocar en la calle hubiéramos mandado a la mierda a Ana Botella. Me inquietó que los músicos fueran a hacer estas pruebas. Yo no hubiera pasado el casting. Ni ese ni el de Operación Triunfo, ni el de La Voz … Bueno, ni yo, ni Leonard Cohen, ni Dylan, ni Tom Waits, ni ninguno de los que me gustan”.
Nuevo disco para el año que viene
“Lo bueno de dibujar o garabatear es el onanismo, y el onanismo a mi edad es mejor que el sexo entre dos porque no hay miedo a hacer el ridículo”. Por otro lado, “me da pudor y vergüenza mostrar estos dibujos porque no he pensado en mí mismo como dibujante y tampoco nunca hubiera pensado en publicar esto”, señala.
Para él, Muy personal es el producto de un fracaso, “el producto de no haber podido sacar mis propias memorias en prosa” -sólo “un atasco”, confiesan desde la editorial-. “Como no pude terminarlas, después de haber hecho perder tanto tiempo a Planeta, al final decidí publicar ésto”.
¿Canciones? También. “Es probable que por marzo o abril tenga nuevo disco. Ya tengo bastantes temas compuestos y sigo en ello. Estoy más ilusionado con este disco de lo que he estado con los últimos cuatro o cinco”. Pese a todo confiesa que dibujar es más feliz que escribir, porque hay muchos colores. “Si todo está bien con tu novia y eres feliz no te sale ninguna canción, pero si lo dejas o estás triste y desesperado entonces salen cosas. Con el dibujo es distinto porque estando contento siempre sale un pececito, un no sé qué…”
Entre todos los pintores, contundente, se queda con El Roto.
Muy personal
Joaquín Sabina
Planeta
172 páginas
24,90 euros
Fuente: hoyesarte.com