Las niñas ingenieras y sus juguetes: una iniciativa que demuestra que las chicas merecen más que princesas
Las tendencias y sobre todo los estereotipos marcan no sólo la personalidad de la gente de acuerdo a su sexo, sino también sus preferencias hacia determinadas ramas del saber. Así, se tiene que la ingeniería es una disciplina típicamente masculina, al contrario de las humanidades, en donde las mujeres tienden a tener mayor cabida. Sin embargo, cuando muchos pensarían que se trata únicamente de un problema de inequidad y falta de oportunidades, hay quienes afirman que se trata de un problema de formación que tiene sus raíces en la niñez misma.
De esta manera, Debbie Sterling, una joven ingeniera estadounidense licenciada en Stanford se propuso cambiar esta situación al crear un juego que motive a las niñas a ser ingenieras creando una compañía de juguetes cuyo objetivo es “mostrar al mundo que las niñas merecen más opciones que las muñecas y princesas”.
Sin embargo, la inquietud de Sterling no es reciente, ya que su experiencia fue fundamental tras estudiar su carrera en la Universidad de Stanford y ver que sólo el 11 por ciento de los ingenieros en su país son mujeres, una cifra que la atormentó y la llevó a desarrollar Goldieblox, un juego que le enseña a las niñas a construir su propia diversión, pero que, a diferencia de una muñeca o un juego de té, invita a continuar la aventura mediante el aprendizaje.
“Creemos que la feminidad es fuerte y que las chicas van a construir el futuro” dice el canal de YouTube de GoldieBlox.
“Cuando era una niña, la palabra ‘ingeniería’ me daba un poco de respeto”, dice Sterling. “Pensaba que era cosa de chicos. He creado GoldieBlox para que las niñas, desde pequeñas, aprendan que la ingeniería también va con ellas. Al incorporar un personaje con un rol femenino con el que las niñas se pueden identificar —además de un toque de humor—, GoldieBlox vence las reticencias y hace que las niñas se interesen por la construcción”, publicó el sitio Compass Magazine.
El juego, por su parte, está orientado principalmente para un público de entre 5 y 9 años, y consiste en un libro y en una plataforma de plástico en la que se pueden colocar distintos objetos prediseñados que permiten al usuario construirse su propia diversión.
Así, a medida que avanza la historia que está en el libro –protagonizado por una chica llamada Goldie, ayudada por sus amigos, un perro, un gato y un oso– es que las niñas se tienen que enfrentar a diversos retos de ingeniería.
Es así que, mediante una estrategia combinada de intereses que GoldieBlox ideó un novedoso método para acercar a las niñas a los juguetes de construcción, asociados más comúnmente a los niños. “La explicación es muy simple: a los niños les encanta construir, y a las niñas les encanta leer. GoldieBlox combina recursos espaciales y lingüísticos, porque las niñas quieren saber por qué construyen lo que construyen” agrega Sterling.
La inventora asegura que cuando llegó a la universidad le tocó ser una de las pocas mujeres que estudiaba esta especialidad. “Los profesores se burlaban preguntando a la clase si yo merecía graduarme”. Ahora, ya graduada, afirma que “además de ser una profesional, he inventado un juguete que estimulará a las niñas a construir. A interesarse por la ciencia”, publicó el diario ABC.
Fuente: Sin Embargo