El Siglo de Oro de las canciones de protesta: melodías que recorren el mundo con un mismo sentir
Atacar a los políticos con música y desear un mundo mejor, eso es lo que estos cantautores tienen en común. Desde los dulzones cantantes de la Motown hasta las melenudas y hippies estrellas del rock, todos apoyan la Music Above Fighting (música contra la guerra).
Antes, los ciudadanos expresaban sus críticas a los acontecimientos sociales mediante la literatura y las artes plásticas. A partir de la segunda mitad del siglo XX, se introdujo un nuevo canal: la música con opinión.
Ritmos excitantes y letras afiladas hacían vibrar los transistores. La canción de protesta tenía un mensaje claro: en la guerra no gana nadie, fuera con ella. Recordamos algunas de esas canciones.
LA GUERRA DE VIETNAM
Mientras las calles de todo el mundo se llenaban de manifestantes, armados con pancartas y lemas pacifistas, y furiosos por la guerra en Vietnam (1955-1975), en los estudios se grababa una canción de protesta tras otra. La guerra de Vietnam parecía ser una gran fuente de inspiración.
“Entonces, la juventud tenía, al menos, ideales. Escuchaba realmente las canciones”, dice ahora aquella misma generación. Quizás es cierto, quizás no. Pero una cosa sí es indudable: el mercado de la música, con sus intereses comerciales y la competencia en cada esquina, tuvo mucho que ver.
Vivimos ahora una época con muchas posibilidades. Basta pensar en la cantidad de emisoras de radio, programas musicales, canales digitales de música y músicos a disposición de la sociedad de consumo en la que vivimos. Si antes, la oferta era mucho más escasa, ahora las canciones tienen más competencia y ya no es tan fácil conseguir un éxito en las listas.
PROTESTAS EN INTERNET
Pero regresemos al papel de las canciones de protesta en tiempos de guerra. Con una canción, los cantautores podían ser la voz de opiniones no expresadas. Eran trabajadores sociales con un micrófono en la mano, en lugar de con un bolígrafo, y la radio ayudó a difundir este tipo de canción.
La sociedad actual tiene más recursos: los ciudadanos descontentos disponen de más canales de comunicación y medios que en la época de la guerra de Vietnam. Hoy en día podemos protestar también a través de internet. La Word Wide Web y las redes sociales ofrecen muchas posibilidades y podemos difundir nuestros textos críticos mediante blogs, foros y redes como Facebook y Twitter.
Un ejemplo típico es el rap Freedom Syria que circula en YouTube. «Siria, no debemos tener miedo. Ahora es el momento y este es el lugar. ¡Revolución! ¡Revolución!» canta el músico en inglés. Si tienes una cámara y algo interesante que decir, puedes colgar tu mensaje en YouTube, como hizo él. Unos se propagan, otros no.
CANCIÓN DE PROTESTA ÁRABE
Al igual que durante la guerra de Vietnam, también hoy se escriben canciones de protesta contra conflictos. La diferencia es que no vienen ya solo de Estados Unidos o Europa. Son los países árabes quienes expresan, a través de la música, su descontento sobre la pobreza, la corrupción y la política, por ejemplo. Unos consiguen hacerse oír, otros son condenados. A continuación describo algunos de ellos.
Tunez
El General, un rapero que se atrevió a criticar al gobierno. En su canción «Rais Lebled» (El Presidente), insulta al entonces dictador, Zine El Abidine Ben Alí. Durante las protestas en las calles tunecinas, su canciones eran coreadas en masa. «Miseria en todas partes, señor presidente. Hablo ahora sin miedo, aunque sé que tendré problemas por ello. Veo injusticia en todas partes».
Efectivamente, el rapero fue detenido. Una semana más tarde, Ben Alí abandonó el país y El General fue liberado.
La canción «Kelmti Horra» (Mi palabra es libre), de la tunecina Amel Mathlouthi, es también muy popular en el mundo árabe. En este videoclip canta en una manifestación en Francia. En el 2008 emigró a París, cuando sus canciones de protesta fueron desterradas de la radio y la televisión tunecinas. Este año actuó en el festival Amsterdam Roots.
Egipto
«Sout el Horaya» (La voz de la libertad), de Amir Eid es, con ventaja, la canción de protesta más escuchada en YouTube (más de dos millones de visitas). En el videoclip, los manifestantes hacen playback en la plaza Tahrir. Un fragmento dice: «Salí y dije: no regresaré jamás. Y escribí con mi sangre en cada esquina de la calle. Logramos que escuchen nuestra voz quienes antes no nos escuchaba, y todas las barreras se rompieron».
También Ramy Essam ha sabido conquistar corazones con su canción «Irhal» (Vete), Dirigida al anterior presidente, Hosni Mubarak. «Somos todos para uno y solo pedimos una cosa, vete, vete, vete».
INTEMPORAL
En general, el mensaje de las canciones de protesta es intemporal. Lo que se criticaba en los años 60 y 70 sigue siendo actual, pero enfocado hacia otro continente. Este artículo pretende devolver al escenario las joyas musicales de la época de la guerra de Vietnam, para darlas a conocer a una generación que no creció con ellas.
Sin Embargo