Modern Family: nuevo concepto de comedia familiar
Por Héctor Anaya.
De las familias convencionales a las que la televisión nos tenía acosumbrados, como La casa de la pradera, El príncipe de Bel Air o Los Serrano, evolucionamos a un tipo de familia moderna, del siglo XXI, acompañados de Modern Family. Homosexuales que se casan, parejas con grandes diferencias de edad e hijos adolescentes descontrolados… en definitiva, una familia desestructurada que no dejará de sorprendernos.
Después de tanta saturación televisiva con familias modélicas y un tanto insulsas, nos encontramos con una auténtica familia contemporánea, donde los clichés no importan ni tampoco los lazos que les unan. Modern Family hará las delicias del espectador, sorprendiéndole e incluso haciéndole reflexionar sobre los cambios sociales de los últimos años.
Rodada en formato documental, lo que le aporta una gran dosis de originalidad, y de la mano de grandes actores y un brillante guión, Modern Family convierte situaciones cotidianas, quizás un tanto enrevesadas, en un universo de carcajadas y humor, pero sin llegar al surrealismo.
Por todo lo anterior, no es de extrañar que la serie haya conseguido hacerse con el Emmy 2013 a mejor comedia.
El único defecto que podríamos sacar a esta serie son los, tal vez demasiados, estereotipos que presenta. Pese a ello, el espectador quedará fascinado con las ocurrencias de los personajes y los sorprendentes giros argumentales que protagonizan.
HÉCTOR ANAYA