Organizarse en los estudios con Evernote
Evernote es una aplicación para tomar notas. Pero lo cierto es que se trata de una herramienta increíblemente potente para capturar y organizar información. De hecho, es el programa que más uso, junto con mi navegador. Su utilidad en los estudios es enorme.
Yo estudio ingeniería mecánica, aunque estos consejos pueden utilizarse con cualquier tipo de formación, incluso autodidacta. El próximo curso tendré que compaginar mis estudios con un trabajo a jornada completa, además de los proyectos en los que participo, como la competición MotoStuden o el diseño de un seguidor solar cilindro-parabólico. Sin Evernote, me sería imposible manejar tal cantidad de información y salir airoso. Y es que, al sincronizarse entre todos mis dispositivos, me permite usarlo en cualquier parte.
Ordenar las notas
Lo que utilizo es una estructura sencilla de libretas. Tengo una pila de libretas llamada “Universidad” y dentro de ella creo una libreta para cada asignatura que curso. Para mí esto es más efectivo que ordenarlo todo por cursos, puesto que es más rápido y sencillo.
Con cada tema de una asignatura, creo una nueva nota. Sólo una por tema. En ella, incluyo toda la información de que dispongo: fotos o escaneos de mis apuntes de clase, documentos pdf proporcionados por el profesor, alguna foto de la pizarra o información que no pude copiar a mano, enlaces de Internet o nombres de libros sobre el tema, archivos de cualquier programa que se haya usado… Cuando se trata de una materia muy pesada o aburrida, intento incluir algún enlace a un vídeo relacionado que amenice después el estudio.
Puede que alguien grabe las clases en audio o quizás una tutoría individual con el profesor. La aplicación para móviles de Evernote es perfecta para esto, ya que dispone de grabadora integrada.
Otra herramienta bastante potente son as etiquetas. En cada nota se pueden añadir varias, de forma que sea más sencillo tenerlas localizadas.
Cómo usarlo en la acción
Todo esto está muy bien desde la tranquilidad del escritorio de casa, pero cómo se puede utilizar todo esto durante el ajetreo del estudiante.
En clase
Aquellos que utilicen un portátil para tomar apuntes, lo tienen bien sencillo. Van añadiendo la información en su nota correspondiente y listo. Pero hay situaciones en los que esto no es una solución muy adecuada.
En mi caso, al estudiar ingeniería, tengo los apuntes siempre llenos de fórmulas, gráficos y dibujos y, sinceramente, es mucho más rápido capturarlos con una hoja de papel y un boli. Para mí es lo más versátil en esos momentos. Hay aplicaciones que permiten escribir con un stylus en el tablet como si fuese un cuaderno, pero no aportan la misma fluidez, por ahora. Los que utilicen iOS tienen Penultimate, apadrinado por la propia Evernote, y a los usuarios de Android les recomiendo Papyrus.
Yo uso un único cuaderno para toda mi actividad académica. Después lo reviso cada día y selecciono únicamente lo que me interesa, pues mucha información está ya en el material que facilita el profesor o en algún libro recomendado. Algo que me gusta hacer es “tunear” los pdf de las asignaturas. Si, por ejemplo, el profesor ha colgado en Internet las diapositivas que usó durante la clase, las descargo y añado a la nota correspondiente en Evernote. Al procesar mis apuntes del cuaderno, voy subrayando cosas en las que hizo hincapié, añadiendo comentarios, alguna foto o incluso reestructuro los conceptos como yo crea adecuado. De esta forma tengo un material personalizado a mi gusto que me ahorra mucho tiempo de estudio.
Para esta tarea, utilizo Nitro en Windows y Adobe Reader en mi Nexus 7 (con Aindroid). Los chicos de Evernote son muy de Apple, así que las versiones de Skitch -una aplicación de gran utilidad que también uso muy amenudo- para Mac y iOS permiten anotar en archivos pdf, además de en fotos, como es normal. Durante las clases intento tener el tablet sobre la mesa con el material abierto para hacer alguna anotación o corrección si fuese necesario.
Las tareas para casa también se pueden incluir en su nota con un checkbox o en tu sistema GTD. Para estas cosas o para plasmar una idea que quiero conservar, yo utilizo una libreta (ahora estoy probando la SmartNotebook) y un boli. Al llegar a casa simplemente reviso lo que haya apuntado y decido qué hacer con ello. La nueva función de recordatorios es muy útil para este fin.
Durante el estudio
Cuando uno está estudiando, necesita estar centrado en la materia y no rebuscando papeles o intentando encontrar en Google aquella página tan interesante que vio. El tenerlo todo en Evernote con este sistema, te ahorra horas de tu tiempo, ya que todo está ahí en un segundo.
Como toda la información de un tema está en el mismo sitio, simplemente hay que abrir esa nota y estudiar. Pero a veces queremos recuperar apuntes de años anteriores o algún enlace interesante que usamos en otra asignatura. Con el buscador de Evernote es sumamente sencillo tener en la pantalla todo lo que hayamos capturado a lo largo del tiempo sobre cualquier asunto. Poniendo el criterio de búsqueda, tendremos delante las notas que necesitemos. Sin tener que subirse encima del armario para encontrar los cuadernos viejos o andar pidiéndoselos al vecino al que se los dejamos. También es posible incluir enlaces a otras notas. Simple y rápido.
Por otra parte, están esos tiempos muertos en el transporte de casa a clase o de clase a casa, ratos de espera o cualquier rato libre que ha llegado en un momento poco oportuno y que tiene grandes probabilidades de desperdiciarse. Este problema le hemos tenido todos en época de exámenes, cuando es más delicado aún. Con sacar el móvil o el tablet del bolsillo, se puede aprovechar para dar un repaso o leer un texto recomendado. Otra opción es acceder a Evernote desde la web con cualquier ordenador.
A la hora de hacer trabajos
Algunos trabajos pueden cobrar una dimensión importante y requerir manejar gran cantidad de información. En una nota de Evernote puedes incluir ideas o bocetos de cómo piensas estructurarlo, de cómo colocar un gráfico en tal página o del diseño de la portada.
Yo incluyo todo el material resultante de la investigación: nombres de libros, fragmentos de textos, apuntes de clase, recomendaciones del profesor, enlaces de páginas webs, imágenes… Lo que sea. A la hora de recopilar cosas por la web, me encantan las extensiones para el navegaror de Evernote: WebClipper y Clearly. Muy recomendables.
Si se trata de un trabajo en grupo y tu compañero/s usa/n Evernote, podéis crear una libreta compartida e ir añadiendo allí los avances de cada uno. Así todo el mundo está al día del desarrollo. Si eres el único que usa Evernote (algo que me pasa mucho), siempre tienes la función de compartir notas por e-mail y enviarles tus aportes con una presentación y organización impecables. Esta función también es útil cuando algún compañero te pide apuntes por que no pudo -o no quiso- ir a clase.
Otras utilidades de Evernote
Al tratarse de una aplicación tan polivalente, los usos son casi ilimitados. Como estudiante, tengo una pequeña “biblioteca de referencia” donde añado títulos de libros, con imágenes de la portada a veces, y una pequeña descripción, para no dar mil vueltas por las estanterías de la biblioteca de la universidad. Lo mismo hago con enlaces a webs de interés.
En Evernote también archivo todo el papeleo y burocracia de matrículas, convalidaciones y cosas así. Además, tengo bien localizados mis calendarios y horarios para no tener que andar buscando por la web de la universidad.
Si alguno usa el sistema GTD, Evernote es una herramienta para ponerlo en práctica de forma sencilla y sin complicaciones. De hecho, otro día escribiré sobre mi sistema.