Bill Brandt. Desnudos.
Por Beatriz CBG
El tema de la representación del desnudo humano ha sido tan recurrente en el mundo del arte, que si quisiéramos admirar de cuerpo presente alguna de las primeras de estas representaciones, para conectar, quién sabe, con la consciencia primigenia de nuestra propia sexualidad, posiblemente nos encontraríamos dentro de la cueva de Tito Bustillo (Asturias), contemplando anonadados media docena de figuras de vulvas distribuidas entre diferentes grafías de puntos y líneas, en lo que se hace llamar el El Camarín de las Vulvas.
Sin esa necesidad iniciática, lo que es una representación anecdótica de la prehistoria se transforma en tema recurrente en la historia del arte actual. Más allá de aquello y tras siglos de arte evolucionado, que no evolutivo, la fotografía se presentó en el siglo XX como la forma idónea, no ya de representación, sino de captación del mundo sensible y al contrario del pensamiento popular, de manipulación del mismo desde sus orígenes.
En la imagen fotográfica hay siempre dos miradas, la mirada del que captura la figura y la mirada del que la contempla, y tratándose de la temática del desnudo hay un punto de inflexión entre ambas, la intención del que mira. “Resulta, pues, que una misma realidad se quiebra en muchas realidades divergentes cuando es mirada desde puntos de vista distintos”[1].
Desnudo y mirada. Un tema extenso que quiero concretar en un fotógrafo en particular, Bill Brandt (1904-1983), fotógrafo inglés aunque de nacimiento alemán, ayudante de Man Ray, surrealista, documentalista, fotógrafo social. Catalogaciones sólo necesarias para contextualizar su trabajo, para contextualizarnos a nosotros mismos.
Tras la segunda guerra mundial, y tras haber fotografiado en diferentes vertientes la contienda, Brill Brandt se centró en otro tipo de fotografía, una más artística tras su recorrido fotoperiodístico anterior. En concreto, hizo una serie fotográfica de desnudos femeninos, que posiblemente influenciados por su formación en un ambiente surrealista, los encontramos distorsionados, trocados, recreados en escenografías oníricas. Aunque al contrario que cierta tendiente surrealista, el cuerpo no es un objeto inanimado, sino un ser viviente pero expectante, sugerente en sus formas, dispuesto. Cuerpos que nos llaman a intervenir en la escena para acabar con esa eterna quietud que les rodea.
Particularmente, lo que más me llama la atención en algunas de estas fotografías es el punto de vista, pues la mirada no viene desde el exterior, sino que emerge desde el mismo cuerpo que es fotografiado, una mirada centrada en el cuerpo, no como objeto de deseo, sino casi como objeto de estudio. Un mirada curiosa y a la vez directa, franca. Cómo diciendo, estoy es lo que hay pero hay mucho más por ver.
A good nude photograph can be erotic, but certainly not sentimental or pornographic. – Bill Brandt, Views on nudes de Bill Jay.
Se ha hablado del uso del gran angular para conseguir alterar la forma del cuerpo, gracias a ese ángulo de visión contextualiza la figura, que consigue el protagonismo debido a la distorsión, y esos cuerpos al mismo tiempo dejan de serlo para convertirse en un producto de ensoñación o fantasía, conectando con la realidad desde otra dimensión paralela al mundo que les rodea.
Estas y otras fotografías, se pueden disfrutar en este momento en una gran exposición retrospectiva en Nueva York. Hasta el 3 de agosto, todo aquel afortunado que se acerque al Moma, podrá deleitarse con estas imágenes, englobadas en una exposición que se le ha dado el nombre de “Shadow and Ligth”[2], y que se encuentra en la Galería fotográfica Edward Steichen, fotógrafo que comisarió una de las exposiciones más importantes de la fotografía humanística, The Family of Man, en la cual Bill Brandt también participó.
Una ocasión perfecta para descubrir la clase de mirada que poseemos, ya que el mundo se constituye al fin y al cabo, de la subjetividad del que mira.
[1] La deshumanización del arte. José Ortega y Gasset.
[2] De hecho una muestra gratuita del catálogo en PDF se puede descargar en la siguiente dirección:
http://www.moma.org/docs/publication_pdf/3176/Brandt_PREVIEW.pdf?1362678157
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