Los beneficios del yoga
Entre los beneficios del yoga se encuentra un mayor control de la respiración e incremento de la felixilidad
A estas alturas nadie dudará que una vida sedentaria es absolutamente nociva para la salud. Es por ello que está recomendado realizar ejercicio con regularidad, adaptándolo, siempre, a las capacidades y características de cada persona.
Uno de las prácticas más beneficiosas para el organismo, que ayuda a su vez también a la mente, es el yoga, con resultados comprobados de mejora en todo el cuerpo. ¿Quieres saber para qué es saludable?
Para comenzar, uno de los primeros cambios que experimentará una persona que practica yoga es el aumento de su flexibilidad que, además de dar ligereza al cuerpo si se potencia ayuda a aminorar dolores y tensiones que pueden desencadenar en lesiones. Y es que el cuerpo es una máquina que hay que cuidar diariamente evitando que se oxide.
Con el yoga se aprende además a adquirir correctas posturas corporales, lo que repercutirá en una mejor colocación de la espalda que, a la larga, no sufrirá los típicos problemas que acaecen a medida que uno se va haciendo mayor, como artritis, lumbago, pinzamientos…
Asimismo, se ha documentado que los ejercicios de yoga fortalecen los huesos, previniendo la osteoporosis; y mejoran la circulación al estar basados, sobre todo, en respirar correctamente. Con ello, se disminuye la incidencia de ataques de corazón. Se ha demostrado además que la practica regular de yoga hace descender el nivel de cortisol, la hormona del estrés- cuando ésta se encuentra alta provoca depresión. Sin olvidar que reduce el nivel de azúcar en la sangre y el colesterol “malo”, aumentando el “bueno”. Y hablando del corazón, si los ejercicios se llevan a cabo de manera constante y repetida, pasan a ser cardiovasculares y mejoran nuestra capacidad coronaria.
Al tratarse de una practica que se combina con meditación y relajación, ayuda a concentrarse de tal manera que mejora la coordinación, el tiempo de reacción, la memoria y el coeficiente intelectual.
Aunque pueda sorprender, como los ejercicios de yoga cuentan con torsiones, verticales en las que se apoya sólo la cabeza- tanto para hacia arriba como hacia abajo- y diversos estiramientos que estimulan el aparato digestivo, muchas personas consiguen solucionar sus problemas de estreñimiento a través de esta práctica.
Por último, como ya hemos dicho, no se puede entender el yoga sin relacionarlo con una practica tanto de cuerpo como de mente. Ambos aspectos van ligados tomando conciencia de que si uno de los dos no funciona correctamente, el otro tampoco podrá hacerlo. De este modo, se da gran importancia al aprendizaje de buenas y sanas conductas mentales en las que seamos capaces de dejar de lado nuestros problemas para centrarnos, únicamente, en el momento del ahora. Algo que parece fácil pero que, en la vorágine que vivimos, no siempre resulta demasiado alcanzable sin las adecuadas herramientas para ello.