Un Hotel que se Funde en el Paisaje
Por Marcelo Gardinetti | abril de 2013
Una arquitectura que no obstaculiza el paisaje natural es la forma que utiliza Studio Gracia para materializar un programa singular de hotelería. Endémico Resguardo Silvestre es un atípico complejo hotelero compuesto por 20 cabañas individuales que se encuentran diseminadas sobre la ladera de una colina, en un paisaje dominado por viñas destinadas a la producción vitivinícola.
El sitio donde se extiende este desarrollo se compone de un terreno de 99 hectáreas ubicado en el Valle de Guadalupe, zona vitivinícola de la localidad de Baja California en México, que contiene además una bodega y un área residencial.
El diseño esta concebido bajo un concepto de casa de camping, de manera que cubra las necesidades básicas de cada huésped en contacto directo con la naturaleza. Una serie de senderos naturales conduce al visitante desde la oficina de administración ubicada en el acceso al complejo hasta las cabañas individuales.
Un volumen rectangular perpendicular a la ladera da forma a cada una de las unidades. Los módulos se elevan del suelo mediante una estructura de acero para no interferir directamente sobre la tierra. Esta solución compone parte de la filosofía del proyecto, que establece como prioridad el respeto al ambiente natural en todas las maneras posibles. De esta forma, tampoco obstaculiza la subsistencia de la vegetación permitiendo la libre circulación de aire y el escurrimiento natural del agua de lluvia.
Una pequeña terraza de madera ubicada en la parte exterior, sobre uno de sus lados longitudinales, establece el primer contacto con la unidad. Una puerta pivotante ubicada en la parte media del mismo lado permite acceder a la cabaña, compuesta por un dormitorio con baño privado, un pequeño office y una mesa circular para el desayuno. Una transparencia de piso a techo dispuesta en una de las caras transversales permite disfrutar las vistas al paisaje, confiriendo a la habitación abundante luz natural y ventilación.
Paneles de acero del tipo Corten se superponen para revestir las paredes exteriores. Este tipo de acero cambia su color con el tiempo, de modo que permite armonizar el edificio con el entorno. Las cubiertas inclinadas están constituidas por paneles de metal degradado corrugado. En el interior, muros y cielorrasos blancos confieren un ambiente luminoso y neutro.
Endémico Resguardo Silvestre constituye un complejo particular de alojamiento en contacto con el entorno natural, correspondido serenamente por su arquitectura.
Fotografía: ©Luis García.
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