Propuestas tendenciosas
Por Minerva Santana.
A estas alturas poco se nos puede escapar de lo que trae consigo la primavera que se acerca. Hay tendencias incluso que cansan antes de que lleguen, tras el bombardeo de claves para ” estar a la moda ” en cada temporada. Las pasarelas proponen, las grandes marcas imponen y luego llegan los clones. Para hacerte invertir en ese cambio de estación que han creado para ti, aprovechando que estás deseando despojarte de los abrigos y cierta oscuridad. No todas las propuestas de cada diseñador llegan a nuestras manos, pero existe un compendio de directrices comunes que se alían para decirnos lo que debemos llevar en esta temporada concreta. Es más factible una invasión de las sneakers de Isabel Marant que ver en la calle las sandalias estilo geisha de Prada.
¿ Qué nos llega ?
A parte de los siempre socorridos estampados florales, las rayas marineras y el blanco impoluto, reglas a las que recurrimos cada primavera y verano como valor seguro. Existen más patrones a seguir que varían cada año. Algunos, como las rayas verticales sobretodo en blanco y negro, son de esas tendencias que realmente, antes de poder disfrutarlas, ya estás cansada de verlas. Muchas de las que se rieron a priori de la colección estilo Bitelchús de Marc Jacobs ahora mueren por una camisa o pantalón de este estilo.
Así funciona esto, nunca digas nunca.
Louis Vuitton.
Se apuesta por el binomio blanco y negro, como punto fuerte y realizable en combinaciones y estampados como el damero. Que queda como estrella impuesta por Louis Vuitton que lo lleva más allá utilizando uno de los colores fetiches de esta primavera: el amarillo. Si hablamos de colores, al del astro, habría que añadirle el verde, en varias de sus tonalidades pero sobre todo, el esmeralda que parece ser el encargado de sustituir a ese que bautizaron mint el año pasado. El celeste ( ahora azul bebé ) será el tono pastel a elegir y el turquesa viene pisando fuerte porque a parte de prendas de noche, querrás unos zapatos de este tono. Aunque cualquier color fuerte y vivo resultará apetecible en combinaciones de intensidad cromática para quien sepa hacerlo y total looks del mismo color para quien se atreva.
( Arriba ) Diane von Furstenberg, Akris, Stella McCartney y Gucci. ( Abajo ) Givenchy.
Los volantes: Esas ondas que dan forma a esta temporada, alegrando las siluetas en mangas, escotes y faldas. Así se despidió Ghesquière de Balenciaga y hay que darle una oportunidad a estas elegantes líneas sinuosas. También pudimos ver en ese desfile otra prenda que quiere abrirse paso: el top. Mejor combinado con cinturas altas y buen estado de forma. Esta sensual pieza también viene para esconderse bajo blazers o chaquetas de corte masculino como contraste.
( Izquierda) Balenciaga. ( De arriba a abajo ) Victoria Beckham y Loewe.
La vuelta de lo oriental como gran tendencia cíclica. La inspiración asiática parace volver siempre cada cierto tiempo, pero es algo que al final parece no terminar de calar del todo en el día a día. Quizás sí se haga uso de los estampados florales y sutiles sedas, las cinturas marcadas por un reinventado nudo a modo de obi o mangas kimono. Los brillos metalizados en plata y oro en diferentes tejidos y complementos pueden ser el detalle perfecto en algunos momentos. No solo como reclamo nocturno, sino como punto de destello justo en prendas o looks aportando un toque de lujo con cierto gusto.
( Arriba) Dries Van Noten ( Abajo de izquierda a derecha ) 3.1 Phillip Lim, Unique y Dion Lee.
Tendencias pendientes como el mix de prints o patchwork. Al igual que otras, son de las que puedes admirar en la pasarela y quedarte con al espina de no llevarla a cabo por temor. Nadie dijo que fuera fácil. Venimos de la difícil costumbre adquirida de combinarlo todo: colores, zapatos y bolso… Es complicado romper con ciertos esquemas y que salga bien, pero quien no arriesga, no gana. Esto podemos aplicarlo también al furor del famoso sport chic. Sacar prendas como un pantalón de chándal del contexto puramente deportivo, darle importancia a una beisbolera o a una sudadera y encima combinarlo con stilettos o darles esquinazo por unas zapatillas deportivas. Puede producir una colisión en los cimientos de tus principios estéticos.
Pero si te agrada, ¿ por qué no ? No hay leyes, esto no deja de ser una proposición tras otra, algo a lo que puedes sucumbir o no. Es cuestión de gustos y a veces de actitud. Tanto para llevarlas a la práctica como para ignorarlas por completo: ¿ Quién dijo miedo ?
Fotos: Style.com
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