Audi y las tecnologías de hoy y soluciones para el Mañana
Por Borja de Benito
Audi presenta tecnologías de hoy y soluciones para el mañana en la Feria de Electrónica de Consumo (CES) bajo el lema «Tendencias electrónicas de la próxima década» que está teniendo lugar en Las Vegas. Las novedades de Audi en la CES se centran en la interconexión del automóvil con su entorno, la futura conducción pilotada, la comunicación móvil, nuevos sistemas de iluminación, pantallas de información configurables y tecnología de sonido 3D.
La marca de los cuatro aros afirma que la conducción pilotada será una realidad ya en esta década; Audi muestra en la CES cómo se vivirá una situación de atasco en el futuro. En tráfico denso y lento a una velocidad inferior a los 60 km/h, la conducción pilotada de Audi ayudará al conductor (dentro de unos determinados límites) a realizar las maniobras de giro, y además, el vehículo acelerará y frenará de forma autónoma.
El sistema de Audi para la conducción pilotada en atascos analiza permanentemente la velocidad del propio vehículo y la de los vehículos de alrededor. Se basa en el Audi adaptive cruise control con función Stop & Go, ampliado con dos sensores de radar que registran la zona delantera del vehículo, cubriendo un campo angular de unos 35 grados y una distancia de hasta 250 metros. Una cámara de vídeo con un amplio ángulo de apertura observa las líneas de la calzada; además, es capaz de identificar peatones, otros vehículos e incluso los guardarraíles. Ocho sensores de ultrasonidos supervisan las zonas situadas directamente delante del vehículo y en sus esquinas. Adicionalmente se utiliza un escáner láser que proporciona detalles de gran precisión en un ángulo de unos 140 grados y a una distancia de hasta 80 metros delante del frontal del vehículo.
Con ayuda de la conducción pilotada, el vehículo también se hará cargo en el futuro de las maniobras para aparcar y desaparcar, por ejemplo en plazas de aparcamiento estrechas en la calle, en el garaje… Bajo la supervisión del conductor, el vehículo se sirve del sistema de sensores para realizar las maniobras de giro e introducirse por sí solo en el hueco o en el garaje. Una vez ha alcanzado la posición final, apaga el motor, desactiva el encendido y bloquea las puertas y envía un mensaje de confirmación al conductor. “Ya sólo le queda abrir la puerta para que podamos salir”.
Pero esto no es todo, ya que en una versión más sofisticada, los futuros Audi podrán aparcar y desaparcar de forma autónoma en parkings o aparcamientos subterráneos con una aplicación para smartphone.
Con los servicios y tecnologías de Audi connect, Internet llega al automóvil y el automóvil a Internet. La nueva tecnología aporta al cliente un mayor confort y más placer de conducción. La comunicación con la World Wide Web (www) se llevará a cabo en breve con el nuevo estándar de telefonía móvil Long Term Evolution (LTE), que permite el rápido intercambio de grandes cantidades de datos.
Para un futuro inmediato Audi apuesta por este estándar de telefonía móvil de cuarta generación LTE. La nueva red permite una transferencia de datos de hasta 150 MBit/s en bajada (frente a los 28,8 Mbit por segundo de la telefonía móvil de tercera generación 3G) y tiempos de respuesta mucho más cortos. En diversos países de Europa, así como en EE. UU., existen ya redes comerciales, y en Alemania el estándar LTE está ya activo en algunas grandes ciudades y en muchas zonas rurales.
La tecnología LTE permite el intercambio de grandes cantidades de datos, como música o vídeos en calidad HD, y supondrá un decisivo impulso para el desarrollo de los «datos en la nube». Los pasajeros pueden ejecutar varias aplicaciones simultáneamente en sus terminales móviles o consultar sus archivos de imagen, sonido o video conectados al vehículo a través del hotspot WLAN.
Audi aspira a ser el primer fabricante de automóviles en integrar plenamente el nuevo estándar en el automóvil. La tecnología LTE se irá introduciendo en la gama de modelos ya a lo largo de este año.
La comunicación car-to-X, otro importante aspecto de Audi connect, ofrece infinidad de posibilidades para hacer que la conducción sea más segura, más relajada y más económica. Los automóviles que están interconectados pueden advertirse mutuamente de riesgos tales como hielo en la carretera o coches que circulan en sentido transversal en cruces.
La comunicación car-to-X dispone de un enorme potencial para la difusión en tiempo real de la información sobre el tráfico. Para la puesta en marcha de la tecnología car-to-X, en cuyo fomento Audi participa, se siguen dos vías tecnológicas diferentes. Por un lado se utiliza la red de telefonía móvil para enviar los datos del vehículo de forma anónima a un back-end central. Una vez allí, los datos se procesan por separado y se envía a los diferentes vehículos.
Audi trabaja a toda marcha en el desarrollo de nuevos conceptos de manejo e indicación. Uno de ellos es el Audi virtual cockpit, un cuadro de instrumentos de libre configuración en el que el conductor puede cambiar los indicadores virtuales a su agrado. A simple vista apenas se diferencian de los instrumentos físicos, pero ofrecen una flexibilidad mucho mayor.
La pantalla del Audi virtual cockpit, cuyo tamaño y silueta se basan en la forma del actual cuadro de instrumentos, se ha construido en tecnología TFT. Con su alta resolución, presenta todos los contenidos de un modo sorprendentemente nítido, brillante y rico en contrastes. Los efectos de animación, espejo y luz, caracterizados por su gran calidad, completan su imagen de vanguardia. En segundo plano trabaja un rápido procesador gráfico de la serie Tegra de Nvidia.
Por su parte, los displays sorprenden ya en los vehículos de serie de Audi por su brillante presentación. En la CES Audi presenta una nueva variante: los displays en tecnología 3D, sí, sí, estáis leyendo bien, no me estoy volviendo loco.
Un campo de pequeñas lentes ópticas en la pantalla fractura las imágenes en diferentes direcciones, para el ojo izquierdo y para el derecho. De este modo, el observador percibe una sensación espacial para la que no se requieren gafas 3D.
Audi ofrece los displays 3D en diferentes versiones. La primera de ellas, realizada en la denominada tecnología «2 View», integra una pequeña cámara que sigue el movimiento de los ojos del observador. Basándose en los datos de dicha cámara, un software calcula la salida de imagen de tal modo que el observador siempre ve en la pantalla de 11,6 pulgadas una imagen 3D perfecta.
Con la ampliación de la reproducción musical en la tercera dimensión, Audi pretende dar ahora otro gran paso hacia delante en lo que respecta a los equipos de sonido en el automóvil. La marca de los cuatro aros se convierte en el primer fabricante del mundo en presentar un sistema de sonido 3D para automóvil, que en la CES puede experimentarse en un prototipo técnico Audi Q7 denominado «Audi Q7 sound concept», así como a través de una experiencia de sonido en el stand de Audi.
A través del sonido 3D, el espacio acústico de la grabación musical se reproduce de un modo más natural y apasionante que antes. Esto genera una ligereza y una claridad de la acústica que equivale a la audición humana.
Audi también ostenta un papel de liderazgo en el campo técnico de la tecnología de iluminación. Con motivo de la remodelación del R8, Audi ha introducido recientemente en la fabricación en serie el intermitente con indicación dinámica, que enciende los LED de forma secuencial y por bloques en la dirección de giro, desde el interior hacia el exterior del vehículo. El siguiente paso será la luz trasera generada por un diodo láser, capaz de proyectar una línea o un triángulo sobre la carretera, y de hacerse visible en las partículas de agua suspendidas en la niebla.
Otras tecnologías de iluminación del mañana son los faros Audi Matrix LED, que dividen la luz LED de carretera en un gran número de segmentos individuales. Basándose en la información de una cámara, en los datos del sistema de navegación y en otros sensores, los diodos serán encendidos, apagados, o atenuados por separado según sea necesario, y la luz de carretera pivota ya anticipadamente antes de que se gire el volante para tomar una curva.
Para su introducción a más largo plazo Audi ya ensaya con la tecnología OLED, que al contrario que los LED actuales, compuestos por cristales semiconductores, utiliza un material orgánico. Otra variante de la tecnología OLED en la que Audi está trabajando se denomina AMOLED (active matrix organic light emitting diode) y procede de la electrónica de consumo.
El Audi R18 e-tron quattro, que no dispone de luneta trasera, incorpora en el revestimiento interior del techo un display AMOLED de alta resolución. Proporciona un área visible de 6,8 pulgadas de diagonal, y cada uno de sus más de 600.000 píxeles se puede activar por separado. Ofrece un contraste diez veces superior y consume alrededor de un 30% menos de energía que un monitor LCD de características similares; su tiempo de conmutación es de unos pocos microsegundos, independientemente de la temperatura ambiental. Incluyendo su sistema mecánico, el display tiene un grosor de apenas 7 milímetros.
Se nota por qué Audi está siempre a la vanguardia de la técnica…
Borja de Benito