De paseo por la Isla de Ons
Por Mª Jesús Otero
Para llegar a la Isla de Ons partimos del puerto de Bueu (ayuntamiento al que pertenece). De él partiremos para disfrutar de una travesía relajante. Contemplaremos a lo largo del viaje la costa del Morrazo; la del Salnés, destacando puertos como Sanxenxo y Portonovo .Tendremos la oportunidad de ojear a los marineros en sus labores diarias así como un mundo sin igual de aves marina que nos acompañarán con su gorjeo durante todo el trayecto. Al poco, y casi sin darnos cuenta, tendremos frente a nosotros la Isla de Ons, protegiendo la entrada de la ría, con su peculiar silueta donde destaca el faro y la arboleda que resguarda la zona de acampada.¡Llegamos!, desembarcamos y comenzaremos a sentir una sensación de tranquilidad, libertad y satisfacción que sin duda perdurará durante toda nuestra estancia.
Después de atravesado el muelle, llegaremos a la caseta de información, y, antes de seguir nuestra andadura, no dejaremos pasar la ocasión de pararnos a contemplar la Playa de las Dornas:
Playa As Dornas
Esta playa es el refugio de esta típica embarcación, la Dorna, utilizada por los isleños para ganarse la vida ayudándolos diariamente en las faenas pesqueras para la captura de toda clase de pescado, en especial del Pulpo: cefalópodo que tiene en la Isla y en sus alrededores uno de los mejores criaderos de la península, motivo por el que, los isleños se especializaron en su captura y preparación. Hoy es imperdonable el realizar una visita a Ons y no probar a exquisita «Caldeirada de Pulpo«, su preparación es exclusiva de esta Isla.
Subimos la cuesta que nos lleva al centro del pueblo, barrio de Curro. Aquí se encuentra la zona de servicios al visitante (restaurantes, supermercado, teléfonos, Protección Civil. . . ); también encontraremos la nueva iglesia, lugar desde donde comenzaremos las rutas a proponer.
RUTA MATINAL
Mi recomendación es dirigirnos hacia la zona sur. Es una ruta larga, pero llena de lugares de interés que nos internará en la encantadora historia de la Isla plagada de leyendas.
Puestos en la iglesia y de espaldas al muelle, cogeremos el camino de la izquierda, pasaremos en primer lugar por la Playa de Area dos Cans:
«Es una de las mejores playas que tiene la Isla y, a causa de su cercanía al centro, es la más concurrida en épocas estivales. En ella encontraremos la Losa del Cura: sepulcro antropomorfo que, aunque posee numerosas historias sobre su existencia, no tenemos datos fidedignos de la época a la que pertenece. Es un lugar a visitar, pero sólo será posible sin correr riesgos, cuando la marea esté baja.»
La siguiente playa que encontraremos en el recorrido es la Playa de Canexol:
«Es una bonita playa también, aunque un poco rocosa. En los meses de verano, pasa a ser lugar de baño de los niños de los Campamentos que la Xunta de Galicia organiza en la Isla. Es muy tranquila y por lo tanto agradable para pasar un día relajante.»
Justo encima de la playa, nos encontraremos con unas construcciones que son p
arte de la historia de la Isla:
«De primero una peculiar casa, de las pocas existentes en la Isla de dos pisos, que a lo largo de los años cumplió diferentes funciones en la vida de los isleños: primero sirvió de Rectoral, luego Escuela y, ya en los años 70 del pasado siglo XX, de Taberna y lugar donde se celebraban los Bailes los sábados. Su situación, historia y los magníficos hórreos que la flanquean en su banda posterior, la convierten en la vivienda más interesante de la Isla.
Los Horreos de Canexol, eran empleados por el antiguo dueño de la Isla, el Sr. Marqués de Valladares, para guardar los productos agrícolas con que los isleños pagaban el canon por la estancia o residencia en el lugar que él mismo les había cedido para construir sus casas.»
Horreos do Canexol
Detrás de la casa Rectoral podemos ver el Cementerio y la antigua ermita, lugar sacro y de descanso para aquellos vecinos que nacieron, vivieron y murieron en ella. Carece de importancia turística, pero sí es relevante para conocer un poco más la vida y la historia de esta Isla. Quizás en otra ocasión ahondaremos en él y buscaremos una respuesta a las muchas preguntas qué surgen al mirar sus sepulturas.
También encima de la playa de Canexol y a pocos metros de la ermita, está el Castro y la Cueva de los Moros:
«El montículo de tierra que ojearemos a la izquierda de la Casa Rectoral esconde un Castro aun sin excavar y estudiar, aunque sí se encontraron restos arqueológicos que demuestran la existencia de un hábitat prerromano. Si rodeamos el montículo, nos encontraremos con la Cueva de los Moros, agujero de difícil entrada ya que, con el paso de los años, se derrumbó su parte frontal. Tiene numerosas leyendas de tesoros abrigados y posee varios pasadizos que la comunican con el mar.»
Después de contemplar lo que la historia nos dejó en el barrio de Canexol, seguiremos nuestra ruta de nuevo, entre el mar y los terrenos de cultivo dedicados a maíz y patatas, para llegar al barrio de Pereiró, donde nos pararemos a observar un grupo de casas que aún conservan lo más típico dela Arquitectura Popular isleña.
Pasado este barrio, nos encontraremos con las buenas instalaciones del Campamento de la Xunta de Galicia, donde quincenalmente pasan sus vacaciones niños de toda Galicia disfrutando de un completo programa de actividades relacionadas con la naturaleza.
Nuestro recorrido seguirá, y de todos los caminos que, pasado el Campamento, vamos a encontrar, escogeremos el que va mirando al mar, que nos llevará hasta el Mirador de Fedorentos:
Mirador de Fedorentos
«Desde él tendremos preciosas vistas de la ría de Pontevedra; de la isla de Onza, hermana pequeña de Ons; al fondo las Islas Cíes; y también podremos quedar asombrados con el volar de gaviotas y cormoranes.»
Volveremos al camino y continuaremos por el sendero, bien señalizado, hasta llegar al Buraco do Inferno:
«El lugar más emblemático de la Isla. Es un profundo agujero de 5 metros de diámetro por 40 metros de profundidad, lleno de ritos y leyendas. Lugar sacro para los isleños.
A pocos metros de él, en el mismo cantil, hay un observatorio ornitológico desde el cual podremos observar la entrada del Buraco por el mar y la principal zona de anidamiento del Cormorán Moñudo. Recomendamos prudencia al andar por este paraje.»
Una vez admirado, volveremos sobre nuestros pasos para coger de nuevo el camino y bordeando toda la parte oeste, zonas de cantil, haremos el recorrido de vuelta de nuevo hacia Curro, lugar de donde partimos, no sin antes disfrutar de una relajante caminata llena de tranquilidad, nostalgia, aire puro y felicidad.
De nuevo en el barrio de Curro, haremos un merecido descanso para comer y disfrutar de la magnífica cocina isleña, para después iniciar la ruta que propondré para la tarde.
RUTA DE LA TARDE
Tras la necesaria parada para la comida, donde repondremos fuerzas, nos situaremos de nuevo en la iglesia de Curro, como a la mañana, de espaldas al muelle y cogeremos el sendero que, a la derecha de la iglesia, nos llevará, sin perder nunca el mar, hasta la playa de Melide. Destacar las vistas que tendremos durante todo el trayecto de la ría, de la península del Salnés y de las faenas pesqueras que se desenrollan al lado de la Isla. Llegados a la Playa de Melide:
«Nos encontraremos con una cautivadora playa, de aguas cristalinas, de arena fina y con una enorme arboleda que nos dará la sensación de haber llegado a un lugar paradisíaco. Nos apetecerá dar un baño y, de nuevo, relajarnos al sol en un lugar idílico, donde está permitido el nudismo.»
Desde la playa podremos coger, para iniciar el camino de vuelta, un sendero que nos llevará al interior de la Islay que nos permitirá conocer el Faro de la Isla:
Faro Illa de Ons
«Estaremos en el punto más alto de la Isla (128 metros). Desde allí disfrutaremos de excelentes vistas. Aunque nos gustaría visitarlo y conocer su interior, las visitas al Faro están restringidas sólo a personal autorizado y en algunos casos a grupos organizados.»
Sin lugar a dudas, Ons combina naturaleza, historia, playas y sol, elementos que la hacen atractiva para cualquier persona que busque el pasar un día relajante y diferente al lado del mar. Además consigue que reine en ella un ambiente agradable y familiar que logra que el visitante se sienta como en su casa.
Hacer amigos, pasear y salir moreno, aunque sólo sea por la acción de la brisa marina que sopla enla Isla, serán los hobbies más practicados por todos aquellos visitantes que la quieran conocer.
Si tienes la oportunidad, aquí queda mi invitación para que la disfrutes, seguro que saldrás satisfecho de la experiencia.
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Que debemos saber: |
